Los afectados por el incendio que devastó el jueves dos edificios en el municipio lucense, nueve de ellos menores, pasaron la noche en un hostal LUGO, 3 (EUROPA PRESS)
El Ayuntamiento de Rábade (Lugo) ultima los trámites para poder ofrecer una «realojo estable» a los 13 miembros, nueve de ellos menores de edad, de la familia que perdió el jueves su casa como consecuencia del voraz incendio que devastó por completo dos edificios de viviendas en una céntrica calle del municipio lucense.
Los integrantes de este núcleo familiar, que vivían repartidos en dos pisos diferentes dentro del mismo inmueble donde se originó el fuego, han pasado la noche del jueves en un hostal de la localidad tras la ágil gestión realizada por el área de servicios sociales del municipio, mientras que la otra persona afectada –un hombre que vivía solo en el edificio colindante, que también resultó calcinado– ha buscado por sus propios medios una alternativa habitacional.
«En este momento están en un hotel pero estamos buscándoles un piso o una vivienda porque es lo que ellos quieren. Son una familia grande con niños y lo que quieren es poder volver a estar todos juntos», explica, en declaraciones a Europa Press, la alcaldesa de Rábade, Remedios González, que confía en poder ofrecer una solución habitacional a largo plazo a la familia damnificada en los próximos días.
«Ellos están resignados porque saben que se quedaron sin vivienda, lo tienen muy asumido. Están tristes porque es una situación muy dolorosa, pero lo único que piden es una vivienda para volver a rehacer sus vidas», asegura.
La ausencia de vivienda pública de titularidad municipal en la localidad y el número de integrantes de la unidad familiar afectada, reconoce la regidora, dificultan la tarea, y la posibilidad de ofrecer a los damnificados una vivienda privada en alquiler asoma en estos momentos como la alternativa más factible ante la emergencia provocada por el incendio.
«Rábade es un pueblo pequeño y no tenemos vivienda pública. Aunque hay vivienda, mucha de ella no está habitable. Lo estuvimos gestionando con el Instituto Galego de Vivenda e Solo y parece que la alternativa tendrá que ser una vivienda privada. Alquilar una vivienda. Ellos ya saben que a través de emergencia social lo tienen solucionado», ahonda.
«LA GENTE ESTABA CONMOCIONADA»
El incendio, de cuya existencia alertó un vecino en torno a las 11,30 horas de la mañana del jueves, se originó en la segunda planta de un bloque de viviendas situado en la céntrica calle Gabriela Nieto Chaín de Rábade. Las llamas se propagaron rápidamente obligando a los integrantes de la familia que se encontraban en ese momento en el interior del domicilio a tener que desalojar la vivienda.
El fuego, que arrasó por completo dos edificios y afectó -sin llegar a provocar daños estructurales– la fachada de otros dos inmuebles situados en la misma calle, quedó controlado alrededor de las 14,00 horas sin provocar daños personales.
La humareda generó un gran revuelo en la localidad, que celebraba el jueves una de sus ferias mensuales. «Era muy impresionante ver las llamas, había mucha expectación, la gente estaba conmocionada», rememora la alcaldesa, antes de indicar que de no haber mediado la rápida intervención de los servicios de emergencias, las consecuencias habrían podido ser «mucho más graves».
«Es una calle con mucha vivienda antigua, algunas están restauradas, pero son viviendas antiguas con vigas de madera. Con un poco más de viento o si los bomberos no llegan a actuar con tanta celeridad, el fuego se hubiese propagado», puntualiza.
LAS CAUSAS DEL INCENDIO
Aunque se tiene certeza del lugar en donde se originaron las llamas –la segunda planta del edificio en el que vivía la familia desalojada, que resultó ser el más afectado– se desconoce todavía qué pudo provocar el incendio.
Un cortocircuito en algún electrodoméstico o algún problema relacionado con la cocina del inmueble, según los testimonios de los propios damnificados, podrían estar detrás del siniestro.
Por motivos de seguridad, las tareas de inspección del edificio calcinado no han podido comenzar todavía este viernes y la Guardia Civil deberá recibir un informe de la unidad de bomberos para valorar su intervención e iniciar una investigación con el fin de esclarecer lo sucedido.
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