La presidenta advierte que no consentirá nuevos recortes en un sector que supone el 8% del PIB y el 10% del empleo
La presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, ha solicitado al Gobierno central que reúna a las comunidades autónomas para negociar el nuevo Marco Comunitario 2021-2027 y sus repercusiones en la Política Agraria (PAC). Díaz, en sede parlamentaria, ha defendido la necesidad de consensuar una postura común para negociar en Bruselas, «porque es la garantía de proteger a nuestros pequeños y medianos productores, a los que ya salieron perjudicados en el anterior marco y a aquellos cultivos difíciles, como por ejemplo el olivar de pendiente».
La presidenta ha recordado que, aunque «aún están en el desarrollo de la propuesta inicial del marco financiero», hay que «estar vigilantes, porque Andalucía se está jugando 1.700 millones de euros», en un contexto «donde tenemos una oportunidad histórica», basada en la estabilidad, la seguridad y el crecimiento. «Lo que se decida en Bruselas y lo que después de reparta en Madrid condiciona el salto definitivo que esta tierra está en condiciones de dar», ha dicho Díaz, quien ha solicitado que «no se repitan los recortes del pasado y que Andalucía cuente con los recursos adecuados».
La presidenta andaluza ha alertado que el incremento presupuestario del Marco Comunitario 2021-2027, que crecería hasta los 1,13 billones de euros, se materializará en asuntos como seguridad, defensa y migración «a costa de la reducción de la Política de la Cohesión y la Política Agraria (PAC)», precisamente aquellas que tenían como objetivo la convergencia de las regiones en el marco de la Unión Europea (UE). La única solución ante ello, ha advertido, es incrementar la aportación de los países miembros.
Los datos sobre la mesa «suponen un recorte considerable» que podría alcanzar el 16% en la PAC, algo que ha calificado la presidenta andaluza de «insostenible, si tenemos en cuenta que el 50% de la población de Europa vive en el mundo rural».
Susana Díaz ha recordado que ya en el anterior marco, «cuando estuvimos juntos todas las administraciones en la negociación en Bruselas, a la vuelta en España la comunidad autónoma que salió perdiendo fue Andalucía», con un recorte de 900 millones de euros en materia agraria y 100 en pesquera.
Por eso, ha dicho, «ahora en un momento en el que determinados países miembros se están planteando que su aportación sea menor, que entren nuevos criterios» es necesario trabajar para que la PAC sea «justa con el 50% de la población de Europa» y «especialmente con zonas como Andalucía, con un sector agroalimentario potente, que ha hecho los deberes».
Para la presidenta, no es de recibo, sin embargo, «que el 1,25 % de los perceptores se lleven el 27% de las ayudas de la PAC», y que las pymes, que representan el 80% del sector, solo se lleven el 20%.
El sector agrario andaluz emplea a 300.000 personas.
Díaz, que ha dejado claro el «compromiso europeísta» del Ejecutivo andaluz, ha destacado que los nuevos retos, como la creciente ola de euroescepticismo, el Brexit, la recuperación económica o el terrorismo islamista, condicionarán los futuros tratados.
«Nosotros no compartimos muchas de las decisiones que se han tomado en el seno de la UE, que han dejado a las personas al margen» y ha provocado la desconfianza en las instituciones europeas. Por eso, ha referido Díaz, ahora ha llegado el momento de poner a la ciudadanía en el centro.
Un sector dinámico y competitivo
La presidenta de la Junta ha recordado que el sector agrario andaluz, «dinámico, competitivo y abierto al exterior», supone el 8% del Producto Interior Bruto (PIB) de la comunidad y aglutina el 10% del empleo. No en vano, ha subrayado, Andalucía aporta la cuarta parte de todo el valor de la producción agraria de España; es la comunidad que más empleo genera, con 300.000 personas ocupadas en 7.000 empresas agroalimentarias; es líder en exportaciones de alimentos y bebidas, con una facturación que en 2017 superó los 11.000 millones de euros, y la tiene una renta agraria que el pasado año ascendió a 9.276 millones.
Díaz ha defendido el compromiso del Gobierno con este sector, que se enfrenta a un cambio generacional. No en vano, ha aclarado, «somos la comunidad que más invierte en la incorporación de jóvenes agricultores, con 155 millones de euros para más de 2.500 beneficiarios», y además, Andalucía fue la primera en aprobar un Plan de Igualdad de Oportunidades entre mujeres y hombres en la actividad agroalimentaria y pesquera.
La presidenta ha insistido en la necesidad de contar con una «agricultura y ganadería competitivas y tecnificadas», algo en lo que trabaja el IFAPA (Instituto Andaluz de Investigación y Formación Agraria, Pesquera, Alimentaria y de la Producción Ecológica)», para que se genere rentabilidad y empleo de calidad.
«Sabemos que el sector debe contar con infraestructuras adecuadas, regadíos, caminos o conexiones digitales, y eso hace que tengamos en estos momentos la mayor superficie de riego localizado de España», ha asegurado Díaz, quien ha recordado que la Junta dedica 66 millones de euros para la mejora de regadíos y 109 a modernización de infraestructuras.
«Conocemos la obligación del sector en apostar por la sostenibilidad en ámbitos como la energía, la lucha contra el cambio climático, el agua o la economía, de ahí la aprobación del Plan Estratégico para la Agroindustria de Andalucía o el III Plan de la Producción Ecológica», ha respondido la presidenta, que también ha hecho alusión a la importancia que tiene en la renta directa de los agricultores las ayudas de la PAC, «por eso hemos sido los primeros en pagar estas ayudas». Hasta abril, Andalucía había abonado 1.378 millones de euros a un total de 223.285 beneficiarios de la campaña de 2017, casi el 96% del total previsto, cuando el plazo de liquidación finaliza a finales de junio.
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