Carga contra la oposición, especialmente contra el BNG, por decir «siempre no» y «por sistema» a proyectos industriales
SANTIAGO DE COMPOSTELA, 21 (EUROPA PRESS)
El presidente gallego en funciones, Alfonso Rueda, no ha descartado que la Xunta tenga que iniciar expropiaciones de terrenos en Palas de Rei (Lugo) para situar la planta de fibras textiles y celulosa que proyecta la pastera portuguesa Altri, pero prefiere que el proceso de compra sea por «acuerdos voluntarios».
Así ha respondido este jueves, al ser preguntado directamente sobre si su gobierno descarta emplear el procedimiento de expropiación para facilitar la implantación de este proyecto industrial que provoca una fuerte oposición en entidades ecologistas, en parte de la población y en los partidos de la oposición (PSdeG y BNG).
De hecho, durante una charla celebrada el miércoles en Palas de Rei por representantes de Greenfiber (del grupo Altri), varios vecinos y miembros de la Plataforma Ulloa Viva protestaron al grito de «Altri, no».
Este jueves, Rueda ha respondido que «respeta» las voces críticas, pero que desconoce el «detalle» del procedimiento de compra de los terrenos, por lo que aboga por «esperar» por si la Administración tuviese que tomar alguna decisión.
En este sentido, ha recordado que «no sería la primera vez que hubiese que recurrir a otros procedimientos», en alusión a las expropiaciones, pero el presidente de la Xunta cree que «lo normal y la primera obligación» de la compañía es «llegar a acuerdos voluntarios» con los posibles vendedores.
«Sobre la compra de terrenos, sinceramente, si hay voluntad en la venta y lo que se necesita realmente… Todo eso está en el proyecto, no conozco hasta ese detalle la extensión. No sería la primera vez que hubiera que acudir a otros procedimientos, pero también es cierto que lo normal, lo primero, es intentar llegar a acuerdos voluntarios, como se ha hecho muchas veces», ha explicado.
RECHAZA «POR SISTEMA» DECIR «SIEMPRE NO»
No en vano, Alfonso Rueda ha aprovechado para responder a las críticas que está recibiendo el proyecto, que viene de sectores «que ocultan siempre otros intereses» y que reaccionan «sin conocer los detalles». Por esto mismo, llama a que «todas las partes» hagan un «ejercicio de pedagogía».
Así, el presidente gallego ha rechazado «opiniones apriorísticas» que «por sistema» dicen «siempre no a cualquier cosa que se pueda hacer», una actitud que ha achacado «sobre todo al nacionalismo» del BNG y que hace que «se pierdan muchas oportunidades», como es este proyecto industrial en Palas, que luego «otros territorios aprovecharán».
Asimismo, Rueda ha garantizado que la Administración autonómica «jamás» autorizaría una iniciativa que no cumple «estrictamente con todos los requisitos de carácter medioambiental, ecológico, técnico y normativo».
Por ello, ha abogado por el «diálogo» para explicar estos proyectos y ha cargado contra el BNG porque «no le gusta ninguno» de los que se implantan en la Comunidad: «Es por sistema que no, sin conocer las características, sin conocer el contenido concreto, sin conocer lo que se pretende. Es siempre el no por el no».
«DEMAGOGIA» DE LA OPOSICIÓN
En este mismo sentido, ha acusado al Bloque y al PSdeG de hacer «demagogia» y «oportunismo» con este tema, después de que en el Parlamento gallego votasen hace dos años a favor de una iniciativa por su implantación –el texto aprobado decía «preferentemente» en la comarca de A Mariña, aunque finalmente esto no fue así–.
Para Rueda, el «cambio de postura» de la oposición y sus alcaldes en ayuntamientos próximos a Palas se debe a un «interés electoral», en función de «qué es lo que más le conviene».
En el lado opuesto ha situado a los ‘populares’, que son «coherentes» y que creen que «las cosas, cuando deben ser bien argumentadas deben ir para adelante y, si no, no».
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