MADRID, 17 (SERVIMEDIA)
ACS se marca el objetivo de lograr un beneficio neto anual de entre 850 y 1.000 millones de euros en el año 2026 y unos ingresos que se muevan entre los 43.000 y los 48.000 millones de euros.
Así lo anunció el consejero delegado de la compañía, Juan Santamaría durante su Capital Markets Day celebrado este miércoles, en el que presentó su Plan Estratégico 2024-2026, en el que se plantea realizar inversiones que puedan superar los 7.000 millones de euros.
La empresa presidida por Florentino Pérez tiene la intención de alcanzar un crecimiento anual del 14% en su beneficio neto y del 9% en sus ingresos durante los próximos dos años. Con ello, pretende alcanzar un flujo de caja neto acumulado de entre 3.300 y 4.000 millones en estos dos ejercicios y una remuneración a sus accionistas que se triplique y supere los 2.000 millones de euros.
ACS presentó una nueva estructura “simplificada” en la que se incrementará la “integración operacional”. Santamaría subrayó que en el grupo hay “muchas sinergias” potenciales, ya que “no solo hay un enfoque único para cada uno de nuestros proyectos y una colaboración total entre organizaciones, sino que también queremos asegurarnos de que obtengamos sinergias operativas y en términos de costes”.
De tal manera, la compañía se dividirá en el área ‘Soluciones integradas’, conformada por Turner y Cimic; área de ‘Infraestructuras’, con Abertis, Iridium, Pacific y una división de la alemana Hochtief; y, por último, el área de ‘Ingeniería y construcción’, con Flatiron, Dragados y Hochtief.
Con ello, la compañía da por hecho la venta de su área de servicios Clece. Tal y como adelantó Santamaría en la presentación de los resultados de 2023, la compañía estima obtener entre 2.000 y 3.000 millones por la desinversión de activos como la propia Clece, industriales o la autopista SH-288 de Estados Unidos. Con el flujo de caja que se pretende obtener, el capital para invertir se situaría entre 5.300 y 7.000 millones de euros.
INVERSIONES
Con este importe, la compañía pretende hacer crecer los dividendos (2.000 millones de euros), invertir en oportunidades de infraestructuras “ya identificadas”) por 1.300 millones, comprar un 10% de la australiana Thiess por 200 millones; incrementar el capital de Abertis por 650 millones y, por último, entre 1.200 y 2.900 millones para otros potenciales proyectos.
De cara al año 2030, la compañía identifica oportunidades para invertir entre 60.000 y 80.000 millones de euros, pero se marca el objetivo de 20.000 millones. La inversión de capital de ACS pretende alcanzar entre los 1.200 y los 1.800 millones con la meta de que el valor del ‘equity’ alcance entre 3.000 y 4.000 millones de euros.
De la inversión total, entre 6.000 y 12.000 millones se destinarían al área ‘Digital&Tech’, con los centros de datos como principal activo, para arrojar un valor de entre 3.000 y 5.000 millones en 2030. En la transición energética, el objetivo se mueve entre 5.000 y 7.000 millones con el objetivo de alcanzar un valor de entre 2.000 y 3.000 millones y, en la movilidad sostenible, ACS se marca una meta de 2.600 millones de inversión, con un valor final que superaría los 1.000 millones.
Con todo, la compañía pretende doblar para el año 2030 su valoración de ‘equity’ actual, que Santamaría situó en unos 14.000 millones de euros.
TURNER EN EUROPA
Entre las prioridades para esta década, ACS quiere consolidar su “liderazgo” en los principales negocios y, para ello, expandirá a la empresa estadounidense de construcción Turner por Europa ya que la falta de sus capacidades ‘High-tech’ en el continente son una “pieza perdida” que se debería ocupar con esta operación.
El consejero delegado de la compañía, Peter J. Davoren, detalló en su intervención que la compañía ya ha identificado oportunidades de proyectos relacionados con la tecnología avanzada por valor de 20.000 millones de euros y se han asegurado ingresos por 500 millones este año por este proyecto.
La compañía pretende incrementar sus márgenes un 3% en 2024 y un 3,5% en 2026 e incrementar en su porfolio hacia este sector de alta tecnología, pasando de representar un 25% en 2023 a un 40% en 2027.
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