MURCIA, 6 (EUROPA PRESS)
La Región de Murcia se sitúa por encima de la media nacional en donación de órganos, con 48,4 donantes por millón de habitantes, dos puntos más que el conjunto del país. Así, hasta mayo de 2023 se llevaron a cabo 203 trasplantes, 23 más que en el mismo periodo del año anterior; datos positivos al igual que la tasa de donación de órganos, que ha crecido 6,5 puntos a 30 de mayo de 2023 con respecto al mismo periodo del año anterior, hasta 39 donantes por millón de habitantes.
Respecto al pasado año, Murcia incrementó su actividad de trasplantes un 29 por ciento, al alcanzar los 419 en total, 122 más que en 2021 en un año en el que hubo 79 donantes de órganos, según ha precisado este martes en un contacto con los medios el consejero en funciones de Salud, Juan José Pedreño.
Con motivo del Día Nacional del Donante de Órganos y Tejidos, que se celebra este miércoles para rendir homenaje a las familias de los donantes, ha querido felicitar a la población por esa «generosidad» que se lleva a cabo, así como a los profesionales y asociaciones de pacientes con su mensaje de sensibilización a la población.
Por su parte, el coordinador regional de trasplantes, Ricardo Robles, que ha querido tener palabras de recuerdo para las familias que tienen «la generosidad de dar en momentos de mucho dolor», ha recalcado que «sin donación no hay trasplante», tras lo que ha recordado la labor «muy dura» que supuso en tiempos de Covid.
Robles ha calificado de «buena» la tasa de donación en la Comunidad, ya que en los 5 primeros meses de 2023 Murcia se sitúa «muy por encima de las tasas de donación del pasado año».
En concreto, a fecha de 30 de mayo de 2022 teníamos 19 donantes por millón de población y este año 25,5 donantes por millón de población. «El pasado año hubo 29 donantes y este año van 39, lo que ha permitido realizar más trasplantes que el año anterior», ha indicado.
Preguntado sobre si ese incremento de la tasa de donantes se debe a la incorporación de los hospitales privados, ha comentado que este programa se pondrá en marcha cuando se comiencen a dar conferencias en los hospitales.
Ha revelado que quiere poner al frente del mismo al doctor Mario Royo-Villanova, que ahora mismo se encuentra en Canadá en un programa de donaciones de eutanasia tomando datos, ya que en dicho país «hay mucha donación de ese tipo».
Se tiene previsto que cuando vuelva el 1 de julio de Canadá «se establezca contacto con cada uno de los ocho hospitales que vinieron a la reunión y se hará una formación tanto a nivel de gestión de esos hospitales, como de los profesionales de los mismos».
Principalmente, ha explicado, «aquellos que tengan UCI y otros que tienen paliativos». «La ELA es una fuente muy importante de donación en asistolia, porque se ha conseguido que la muerte encefálica, que era la máxima tasa de donación que había en la Región y en España, este año se ha invertido y de los 39 donantes, 23 son en asistolia y 16 de muerte encefálica, lo que significa que a lo mejor un ictus, que antes se esperaba a que entrara en muerte encefálica, a lo mejor la familia dona antes y se convierte en asistolia y es un fenómeno que puede estar invirtiendo esto».
Así como el hecho de que en las plantas de enfermos crónicos «se buscan más enfermos que están en una situación terminal, pueden ser donantes, como puede ser una ELA».
También ha destacado que de esto depende la eficiencia de los órganos porque hace unos años «se rechazaba entre un 20 y 30 por ciento y el aumentar el número de trasplantes manteniendo el número de donantes significa que los órganos se han obtenido con mejor calidad».
A su juicio, en dicho campo hay futuro y las máquinas de perfusión trabajarán en ese sentido, «aumentando mucho la eficiencia de los órganos».
PROGRAMA ECMO
Ha destacado también la importancia que juega el programa ECMO, que son equipos para la oxigenación de la sangre por membrana extracorpórea. En mayo de 2021 se pusieron en marcha los equipos ECMO portátiles, que cuando no estaban las máquinas de perfusión para mantener al donante estable con tensión buena, recuerda, «había que hacer una extracción ultrarrápida para enfriar el cadáver y sacar los órganos en minutos, lo que suponía un daño para esos órganos y con la ECMO se mantiene la estabilidad del donante y su tensión y hace que la eficiencia de los órganos sea mayor».
Sobre la tasa de negatividad de las familias, ha puntualizado que de las 44 solicitudes, 5 personas no donaron. De esta cuestión, ha comentado que si se es generoso para recibir, también se debe ser generoso para «dar» cuando las personas necesitan recibir trasplantes.
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