LOGROÑO, 22 (EUROPA PRESS)
La concejala del Grupo Municipal Popular en el Ayuntamiento de Logroño, Mar San Martín, ha criticado este jueves que «el alcalde de la ciudad ha sido incapaz tras dos años de legislatura de avanzar en uno de sus mayores compromisos, la denominada modernización tecnológica de la Administración local».
En rueda de prensa, San Martín ha recordado que esta es una de las prioridades que «Hermoso de Mendoza ha reiterado repetidamente desde su llegada a la Alcaldía de Logroño».
Para ello, ha apuntado, «no ha escatimado recursos económicos y humanos, una importante inversión de 2,5 millones de euros y un asesor eventual especializado en esta materia situado en el organigrama por encima de los técnicos municipales del área de Nuevas Tecnologías, sin embargo la realidad es que actualmente este objetivo como tantos otros de la ciudad está paralizado».
Desde el Grupo Popular han explicado que «el principal contrato que sustenta este proyecto, la plataforma de Administración Electrónica, está suspendido desde que el pasado 17 de junio el Tribunal Administrativo Central de Recursos Contractuales fallara a favor de una de las dos empresas licitadores que presentó recurso contra el Ayuntamiento».
Queda pendiente por resolver por parte del Tribunal «las cuestiones que afectan al fondo del recurso presentado en el que argumentan que podría haber defectos en el pliego de prescripciones técnicas, se estarían utilizando criterios para la valoración de las ofertas no previstos en el pliego lo que supondría incurrir en exceso de la discrecionalidad».
Y es que, señalan los ‘populares’, «la Mesa de Contratación desecha la propuesta de la empresa de la concurrente y con ello se vulnera el principio de la libre concurrencia, máxime cuando la única oferta que queda incurre en baja temeraria».
En el recurso se solicita «declarar la nulidad de la exclusión de la oferta desechada, retrotaer las actuaciones y decretar la suspensión hasta que se falle definitivamente, aspecto que ha sido admitido». Los ‘populares’ señalan que «entienden por tanto que existen fundamentos sólidos en el recurso presentado».
Esta licitación se aprobó en diciembre de 2020, 18 meses después de ser comprometida, dos empresas especializadas presentaron sus ofertas en febrero de 2021 dentro del plazo, y en mayo se dio a conocer la valoración de esas dos propuestas.
Ante el recurso presentado por una de ellas, T-SYSTEMS, el Tribunal ha estimado que de no suspender el proceso se podrían derivar perjuicios de difícil o imposible reparación por lo que determina suspender la contratación hasta que se dicte la resolución del recurso.
«Denunciamos el oscurantismo del Gobierno local respecto a este cuantioso contrato que está paralizado y al que se suman otros retrasos también relacionados con el desarrollo de la Administración electrónica de los que tampoco tenemos noticia a pesar de haber transcurrido casi 8 meses desde su licitación», ha añadido la concejala.
Se trata del Sistema Informatizado y de Gestión Integral de Policía Local, Bomberos y Protección Civil, o el de Correo electrónico y soluciones ofimáticas que desde enero aparecen en la plataforma de licitación del Estado pendientes de resolver.
«Estamos ante un nuevo ejemplo de gestión ineficaz, de incumplimientos reiterados y de recursos económicos municipales hipotecados», ha afirmado San Martín. «Dos años después -ha añadido- los ciudadanos prácticamente pueden realizar los mismos trámites electrónicos que en la pasada Legislatura, lo poco que se está haciendo es gracias al trabajo y profesionalidad de los técnicos municipales».
Los ‘populares’ han señalado que esta deficiente manera de gestionar los recursos públicos puede tener como consecuencia que este proyecto licitado en 2020, con dos años y medio para su ejecución y con la suspensión impuesta por el Tribunal, resulte obsoleto.
En este sentido, San Martín ha recordado que es algo que ya ocurrió con el anterior Gobierno socialista en el Ayuntamiento de Logroño, una inversión millonaria en la Tarjeta Ciudadana y los Puntos de Gestión Municipal desplegados por la ciudad sin que los vecinos llegaran nunca a poder utilizarlos.
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