MADRID, 2 (EUROPA PRESS)
El alto representante para Bosnia y Herzegovina, Christian Schmidt, ha anulado a última hora de este sábado una decisión adoptada por la Asamblea Nacional de la República Srpska, la entidad serbia de Bosnia y Herzegovina, para invalidar las sentencias del Tribunal Constitucional bosnio e impedir su publicación en el boletín oficial del estado.
Schmidt, que está capacitado para tomar esta clase de medidas como garante de los acuerdos de paz de Dayton (EEUU) que pusieron fin a la guerra en Bosnia, ha actuado después de que Estados Unidos denunciara la decisión de la Asamblea Nacional como un ataque de secesionismo que amenazaba la integridad de Bosnia y Herzegovina.
«Las recientes decisiones adoptadas por la Asamblea Nacional de la República Srpska violan directamente el orden constitucional de Bosnia y Herzegovina, así como los acuerdos de paz de Dayton», ha zanjado Schmidt en rueda de prensa en Sarajevo, recogida por el portal Raport.
Es más, Schmidt ha enmendado el Código Penal para endurecer las penas sobre cualquier tipo de acto de «desobediencia» como el que, entiende, ha efectuado la Asamblea Nacional. Hasta ahora, este tipo de delito solo estaba castigado en el caso de que existiera una agresión física de por medio. Con esta enmienda, iniciativas políticas que atenten contra la integridad de Bosnia y Herzegovina estarán penadas con cinco años de cárcel.
La decisión de la Asamblea fue impulsada por el presidente de la región, el separatista prorruso Milorad Dodik, quien no reconoce la figura de Schmidt al entender que no está validada por el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas. La gota que colmó el vaso fue una iniciativa adoptada la semana pasada por el Constitucional, que capacitaba a la corte para convocar sesiones y adoptar decisiones sin la presencia de jueces serbios. Dodik y sus aliados critican asimismo que la naturaleza del Constitucional está desvirtuada al incluir a tres jueces extranjeros: un magistrado alemán, un albanés y un suizo.
«La República Srpska no va a aceptar ni una sola decisión de este falso ‘alto representante'», ha asegurado Dodik en respuesta a la declaración de Schmidt.
En el capítulo de reacciones, la Embajada de Estados Unidos ha sido la primera en expresar su opinión al celebrar la comparecencia de Schmidt como un acto en defensa de la «soberanía, la integridad territorial y el carácter multiétnico de Bosnia y Herzegovina». «La Embajada», añade en un comunicado, «seguirá responsabilizando de sus actos a aquellos individuos cuyo comportamiento vaya en contra de los acuerdos de Dayton».
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