El conseller de Hacienda y Modelo Económico, Vicent Soler, ha visitado las obras de rehabilitación del Tinglado 2 de La Marina de València, donde ha desvelado que este lunes mantuvo una larga conversación con la secretaria de Estado de Hacienda y vicepresidenta del Consorcio València 2007, Inés María Bardón, sobre los problemas financieros que arrastra la infraestructura portuaria.
«Hemos iniciado conversaciones sobre el problema de la deuda de la Marina y soy optimista porque el muro de silencio del pasado ahora es diálogo y ganas de encontrar soluciones», ha manifestado Vicent Soler.
El conseller, que ha realizado la visita junto con el alcalde de València, Joan Ribó, y el director del Consorcio València 2007, Vicent Llorens, ha destacado que «la deuda de La Marina es plomo en las alas del Consorcio porque sin la condonación o reestructuración de esta carga financiera, no podremos mirar al futuro con la esperanza que necesitamos».
Soler se ha referido así a la deuda de más de 420 millones de euros que arrastra el Consorcio Valencia 2007 y que cuenta con el aval del Gobierno central. Además, La Marina tiene también otra deuda de más de 60 millones de euros que deriva de una operación suscrita con el Banco Santarder, que posteriormente fue vendida y ahora mismo está en manos de un intermediario financiero.
«La carga financiera de La Marina lastra las posibilidades de reconvertir esta zona que estaba en desuso y abandonada y ponerla en valor, para el disfrute de todos los valencianos», ha afirmado el conseller de Hacienda.
«El Consorcio València 2007 ha apostado por este espacio, que es un emblema y un símbolo del cambio, y queremos convertirlo en un polo de atracción de la innovación y además ponerlo al servicio de los barrios cercanos para que se convierta en una gran ágora», ha destacado Soler.
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