CASTELLÓ, 10 (EUROPA PRESS)-
La consellera de Innovación, Industria, Comercio y Turismo, Nuria Montes, ha asegurado hoy que si hay alguna responsabilidad política sobre lo que ha ocurrido en la empresa Marie Claire, es del gobierno anterior, y ha recordado que «de los casi 500 trabajadores que tenía la fábrica, 400 fueron despedidos durante el Botànic».
Montes se ha pronunciado así ante los medios al ser preguntada al respecto durante la visita que ha realizado al Ayuntamiento de Burriana (Castellón) y a las instalaciones turísticas más destacadas de la ciudad.
La consellera ha destacado que la «crisis y declive» de Marie Claire se produjo durante los ocho años del Botànic, «pues unos días antes de la convocatoria de las elecciones municipales y autonómicas de 2023 Marie Claire entró en preconcurso de acreedores y el concurso se declaró apenas tres días después de haber perdido las elecciones el Botànic».
«Nosotros nos encontramos la fábrica en pleno concurso de acreedores, donde la Generalitat Valenciana invirtió ni más ni menos que 24 millones de euros, los últimos diez apenas nueve meses antes de presentar esa situación de concurso de acreedores», ha recordado.
«Quizás no parece que los informes económicos estuviesen lo bien hechos que deberían haber estado cuando se invierten 10 millones de euros de todos los valencianos en una empresa que nueve meses después tiene que cerrar, que se suman a los 14 millones de euros anteriores», ha añadido Montes.
La titular de Industria ha señalado que el Gobierno valenciano está preocupado en que «si puede continuar la línea productiva de esta fábrica se haga, pero con bases sólidas y con ofertas que garanticen el empleo en la zona». «En eso estamos trabajando desde que llegamos al Gobierno y en eso seguiremos trabajando para esta fábrica, a la que se suman otras fábricas», ha dicho.
Respecto a la posibilidad de que se presente otra oferta para permitir la continuidad de Marie Claire, la consellera ha advertido que estarán «vigilantes» sobre todo «para que la oferta que se presente, si finalmente fuese aceptada, sea la que asegure la continuidad de la empresa en sus instalaciones actuales y, sobre todo, la continuidad de los puestos de trabajo».
OTRAS FÁBRICAS
Montes también se ha referido al cierre de otras empresa como la planta de Bimbo en El Verger (Alicante), en la que -ha dicho- han trabajado «desde el minuto cero» con ellos, «y antes de que se extinguieran todos contratos de trabajo casi el 60 por ciento de los trabajadores ya tenían un nuevo empleo y el 40% restante estaba en las vías de formación y recualificación profesional para poderse incorporar al mercado laboral. «Nuestra preocupación principal siempre es el activo humano, pues las decisiones empresariales no las podemos modificar», ha añadido.
Respecto a la empresa ThyssenKrupp Galmed de Sagunto (Valencia), Montes ha recordado que la Generalitat «ha hecho todo su trabajo, ha puesto encima de la mesa todas sus capacidades de ayuda a esta fábrica en materia de inversión productiva para mejorar sus procesos productivos, y la Secretaría de Estado de Industria es la que no ha puesto encima de la mesa nada y no ha prestado de momento ninguna ayuda para que esta fábrica pueda continuar abierta».
«Creo que es obligación de todos velar, además, por la continuidad del tejido productivo industrial de la Comunitat valenciana porque nuestra estrategia de reindustrialización pasa por mantener las industrias abiertas», ha concluido.
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