Hay 13 detenidos tras un operativo que culmina más de un año de investigación
SABADELL (BARCELONA), 21 (EIUROPA PRESS)
Los Mossos d’Esquadra han desmantelado un presunto clan criminal, instalado en el barrio de Can Deu de Sabadell (Barcelona), que supuestamente ha blanqueado más de tres millones de euros procedentes del cultivo de marihuana en los últimos cinco años.
Hay 13 detenidos como presuntos autores de blanqueo de capitales, de tráfico de drogas, tenencia de armas de fuego y defraudación del fluido eléctrico, ha informado la policía catalana este martes en un comunicado.
La investigación arrancó hace más de un año, cuando detectaron que el grupo «había adoptado una posición de poder» en la zona en el control de tráfico de marihuana y también en el Vallès Occidental (Barcelona).
Las pesquisas determinaron que el presunto clan controlaban ocho cultivos intensivos de interior en diferentes localidades de la provincia de Barcelona, la mayoría en la ciudad vallesana, y que producía más de 200 kilos anuales con «un volumen de beneficio por año alrededor de los 400.000 euros».
Para blanquear este dinero, según la investigación, compraban diferentes fincas y vehículos a través de testaferros; según los Mossos, había una «una inequívoca desproporción» entre sus rentas de trabajo y el ritmo de vida que llevaban.
La policía catalana ha remarcado «la complejidad» de su modo de operar: los detenidos desplegaban medidas de seguridad para evitar la acción policial, y contaban con un entorno numeroso de colaboradores en el barrio como vigilantes.
TRES INGRESAN EN PRISIÓN
Con todos estos elementos, y bajo la coordinación del juzgado de instrucción número 4 de Sabadell, la semana pasada se llevó a cabo un operativo policial con 17 registros en diferentes localidades de Barcelona.
La operación acabó con la detención de estas 13 personas y con el decomiso de ocho cultivos de marihuana, con mas de 4.000 plantas, tres armas de fuego, 20.000 euros en efectivo y documentación económica de interés para la causa.
Los pasados días 17 y 18 de septiembre, los 13 detenidos pasaron a disposición judicial y el juez decretó presión provisional para tres de ellos y la libertad con cargos para el resto.
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