La asociación llama reconocer la «presencia cotidiana» del autismo y a «desterrar los estigmas y prejuicios»
PAMPLONA, 31 (EUROPA PRESS)
El 2 de abril se celebra el Día Mundial de Concienciación por el Autismo y, con este motivo, la Asociación Navarra de Autismo – ANA ha organizado el próximo sábado, 6 de abril, un conjunto de actos en la Plaza del Castillo de Pamplona y en la Plaza Mayor de Tudela.
En la capital navarra el acto central será una concentración de Mariachis por el Autismo, a las 11.30 horas, en la que participarán, entre otros, los grupos A toda Madre, Rumbo Tijuana, Destino Sonora, Los Cazahuates, El Charro de Abárzuza y Chuchín Ibáñez.
Las actividades comenzarán a las 10.00 horas con mesas de sensibilización, hinchables y pintacaras que se extenderán a lo largo de todo el día hasta las 20.00 horas. A las 12.00 será la entrega de premios XII Edición Concurso de dibujo por el Autismo. A las 17.30 horas habrá una masterclass de zumba con el grupo Zumba Love Pamplona y a las 18.30 un concierto solidario con el grupo Épsilon.
La Plaza Mayor de Tudela acogerá, también, mesas de sensibilización, hinchables y pintacaras a lo largo de todo el día. A las 12.00 horas será la entrega Premios XII Edición Concurso de dibujo por el Autismo.
En un manifiesto con motivo del Día Mundial de Concienciación sobre el Autismo, ANA ha destacado la necesidad de que toda la ciudadanía reconozca la «presencia cotidiana» del autismo. «Cada persona con autismo puede ser un vecino, un amigo, un familiar o compañero de colegio de nuestros hijos», ha subrayado la asociación, que ha llamado a «un compromiso colectivo que celebre la diversidad y contribuya a promover la inclusión real de todas las personas en nuestra sociedad».
Según señala, «en nuestro país, esta condición tiene una prevalencia aproximada de 1 de cada 100 nacimientos, lo que significa que hay unas 470.000 personas con autismo viviendo en España». Ha precisado, además, que «el autismo se manifiesta de manera diferente en cada persona que lo presenta y no siempre es fácilmente identificable a simple vista. Por ello, podemos tener cerca a alguien que está en el espectro del autismo y no saberlo».
Así, ha destacado que «es crucial desterrar los estigmas y prejuicios asociados con el autismo y reconocer su presencia cotidiana en nuestras vidas. Porque no se trata de una condición extraña que deba ser ocultada o marginada, sino de una variación natural en la forma en que las personas experimentan el mundo y se relacionan con él».
«Al reconocer que el autismo está cerca de nosotros, podemos contribuir a construir un mundo donde cada individuo sea valorado y respetado por lo que es. Una sociedad más inclusiva y comprensiva, enriquecida por las distintas alternativas de verla y experimentarla. Porque cada persona con autismo es única, con sus propias fortalezas, desafíos y experiencias», ha defendido.
ANA ha pedido a la sociedad «compromiso para escucharlas, tanto a ellas como a sus familias, para entender mejor sus necesidades y aspiraciones», «fomentar la aceptación y el respeto hacia todas las personas con autismo», rechazando «cualquier forma de discriminación, estigmatización o exclusión que impida que puedan vivir con dignidad, respeto y aceptación».
Por todo ello, ha instado a los gobiernos europeos, nacionales, autonómicos y locales a que «adopten medidas concretas que garanticen a las personas con autismo el acceso equitativo a los servicios y recursos especializados que necesitan, así como su participación social en igualdad de condiciones en entornos inclusivos».
Ha puesto el foco especialmente en «áreas clave como el diagnóstico y la atención temprana, la educación» y ha exigido «medidas urgentes para acabar con la lacra del acoso escolar que llega a afectar hasta el 80% del alumnado con autismo, la vida independiente, o el empleo donde cerca del 90% de personas con autismo están en situación de desempleo».
«Los poderes públicos deben asumir su responsabilidad y promover políticas públicas que no dejen de lado a una parte de la sociedad, materializando los compromisos adquiridos en medidas tangibles en la vida de las personas con autismo. Solo así podremos construir un mundo donde todas las personas podamos vivir con dignidad, libertad, igualdad y respeto», concluye la asociación.
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