LOGROÑO, 24 (EUROPA PRESS)
El Sindicato Riojano de Policías y Funcionarios (SPRF) ha mostrado este jueves su «sopresa» por unas declaraciones realizadas por la alcaldesa de Calahorra, Mónica Arcéiz, sobre la mejora de las condiciones para la Policía Local de la localidad cuando, dice el sindicato, «apenas se han iniciado las negociaciones».
En un comunicado, el SPRF señala que «queremos valorar que se reconozca el problema que existe con la Policía Local de Calahorra, siendo uno de los cuerpos peor remunerados de La Rioja, además de contar con un volumen de trabajo únicamente comparable al de Logroño, cuestión que se acrecienta con la notable carencia de efectivos de Guardia Civil».
Algo, argumentan que esta situación «lejos de ser puntual, viene arrastrándose desde hace bastantes años sin que ninguna de las Corporaciones anteriores decidiera ponerle solución y sin importarles que muchos de los efectivos policiales cambiaran de destino para obtener unas mejoras que en Calahorra se antojaban imposibles».
Por eso, señalan que «sorprende a esta organización sindical que se trate este asunto de manera pública, cuando apenas se han iniciado las negociaciones».
Incluso, añade, cuando «no se están llevando a cabo con el colectivo policial en concreto, ni los delegados de personal del mismo tienen constancia de que la mejora de las condiciones será gradual o que la plantilla de policía se está reforzando con más turnos».
El SRPF apunta que «la plantilla de policía ya era conocedora de la intención de la mejora de las condiciones, ya que tanto la concejal de Policía como la alcaldesa así lo trasladaron, pero a día de hoy no hay respuesta a las demandas de la plantilla de Policía Local, solo promesas e intenciones».
Señalan además que «un día después de la publicación de la nota de alcaldía, se publicaron los resultados de la última prueba de la oposición de Policías Locales de La Rioja, donde Calahorra oferta 12 plazas, queriendo mejorar la imagen de la policía local de Calahorra e intentando ser un destino más atractivo que lo que actualmente es, para los/as aspirantes que deberán elegir destino próximamente».
Por el contrario, afirman que «la realidad es que la plantilla de Calahorra está agotada, tanto por el volumen de trabajo y horas extras realizadas, como por las continuas promesas de mejoras que no terminan de darse y los obstáculos a las propuestas de la plantilla, generando una profunda desmotivación y malestar entre los/as policías».
«Si realmente se quiere convertir a Calahorra en un modelo policial de referencia, tanto en trabajo como en condiciones laborales, la solución no son las declaraciones de intenciones, ni públicas ni privadas. La solución es iniciar negociaciones «reales» con el colectivo policial y no solo enfrentar el problema, sino solucionarlo», finalizan desde el Sindicato.
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