LOGROÑO, 16 (EUROPA PRESS)
El Clúster de la Construcción de La Rioja (ARIC) es optimista antes las previsiones del sector en los próximos meses, que «han mejorado respecto al principio del año», con precios de materiales que se estabilizan aunque con problemas aún en aspectos como el déficit de mano de obra especializada.
La organización ha celebrado este viernes en el Espacio Lagares de Logroño su asamblea anual «en un contexto dominado por la tendencia mundial hacia procesos y materiales más sostenibles y hacia modelos y metodologías industriales de construcción para ahorrar costes y mejorar la eficiencia».
Como ha subrayado el presidente del Clúster, Ismael Martín, «ahora mismo estamos en el ecuador del año y las previsiones han mejorado respecto al inicio del año, se han estabilizado los precios de materiales, aunque sí que es verdad que tanto a nivel de empleo como de volumen de negocio ha bajado, pero no tanto como en el primer trimestre».
«Más o menos -ha continuado- hay cierta mejoría a estas alturas del año, aunque la previsión para los próximos doce meses es de prudencia, porque hay que ver cómo evolucionan los tipos de interés, los temas externos, de influencia de los precios materiales con la guerra y con otra situación, también política, que son situaciones de cambio en algunos casos y hay que ver un poco cómo evoluciona».
Por todo ello, ha vaticinado que, en conjunto, «se prevé cierta estabilidad y sobre todo cierto enfoque de las empresas a la rehabilitación y a las nuevas tendencias en construcción», al tiempo que no se ha mostrado preocupado por la posibilidad de que la subida de los tipos de interés propicien una ‘burbuja’ en el sector similar a la del año 2008.
«En el sector en general no hay miedo a que haya una burbuja como tal. Sí que es verdad que la subida que ha habido, casi irrefrenable, en los últimos meses, sobre todo a finales de 2022, de los materiales ha provocado muchos temores e incluso muchos problemas. Pero en el último trimestre los materiales han bajado, la madera, el hierro… Hay cierto optimismo», ha señalado Ismael Martín.
Con todo, «aparte del tema de la inflación, hay otro aspecto que influye, y que son los dos caballos de batalla del sector que está por venir en el próximo año, y que es la mano de obra, hay poca especializada y también es una dificultad que se está encontrando la construcción».
Por su parte, la directora de ARIC, Marta Epelde, ha recordado que «somos un clúster que nació muy especializado en temas de eficiencia energética y ‘basic house’, es decir, estándares energéticos muy importantes», algo en lo que, ha afirmado «en los últimos años ha venido un poco Europa y las ayudas a darnos la razón».
«Hoy en día -ha añadido- la sostenibilidad y la eficiencia energética es tendencia y nosotros estamos ahí desde hace mucho, apoyando a nuestras empresas y a La Rioja para que todo esto salga adelante». Una tendencia que también cuenta con apoyo europeo, para lo que se ha puesto en marcha desde la entidad «una campaña para que las ayudas de rehabilitación de los Fondos Next se vayan poco a poco implantando».
Epelde ha incidido en el éxito que está teniendo la campaña, que se lanzó «hace apenas un par de semanas y sobre la que estamos teniendo llamadas, emails, muchas consultas, se ve que había la necesidad de cubrir esa parte en la que la gente pudiera hacernos partícipes de sus consultas».
Una labor a la que se suma «que estamos ya empezando también a impulsar las nuevas tendencias, estamos ya intentando trabajar el tema de la industrialización, que es el nuevo modelo de construcción». A ello han ido enfocadas algunas de las últimas acciones del clúster, una misión a Europa o el trabajo con otros clústers de toda España.
Epelde ha especificado que, cuando se habla de la industrialización en el sector de la construcción «lo que está intentando es influir en todo el proceso, dejando de pensar en temas relacionados con la pura prefabricación para intentar integrar todo a la cadena de valor».
Así, ha incidido en que «pasamos ya del prefabricado a diseñar de otra manera, a planificar los materiales de otra manera, a buscar en toda la industrialización la sostenibilidad, por lo que se empezará a hacer procesos mucho más integrados, desde el propio diseño y concepto de los materiales, a los diseños de los edificios, a la construcción e incluso el fin de vida útil de los propios edificios».
«Y en todo esto -ha reseñado- los clústers tenemos mucho valor, porque integramos no solo a la constructor, sino también a todos los demás elementos del sector, desde fabricantes, arquitectos, incluso Gobierno o toda entidad tecnológica que pueda estar involucrada en el proceso».
Respecto al contenido de la asamblea de este viernes, la directora de ARIC ha querido subrayar que «para nosotros, el año 2022 ha sido el año de la consolidación», desde que la organización comenzó su andadura en 2019, «ya que ha sido éste el año en el que nos hemos convertido en otro de los clústers de La Rioja reconocidos por el Gobierno».
«Ya somos 18 socios, que estamos dinamizando ayudas, que estamos tratando de impulsar tendencias tecnológicas a nivel europeo en La Rioja y que, de alguna manera, hoy es un momento de repasar lo hecho y también de ver un poco nuevas ideas y contactar con esos socios para que nos pregunten y nos pidan sus carencias y sus necesidades, qué podemos hacer por ellos», ha concluido Epelde.
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