MADRID/CÁCERES, 09 (SERVIMEDIA)
La secretaria general de Podemos, Ione Belarra, insistió este jueves en la petición de una banca pública que siempre ha hecho su partido porque, a su entender, «juntos o separados el BBVA y el Banco Sabadell van a seguir esquilmando a la población española».
Lo hizo en declaraciones en Cáceres, donde acudió al Festival Womad, donde se leyó un manifiesto de apoyo al pueblo palestino. Allí, además de reiterar el mensaje que ya trasladó en redes sociales de que el «genocidio» de Gaza perseguirá al actual Gobierno si no hace nada para remediarlo, como la guerra de Irak persigue al PP, se refirió a la OPA hostil que el BBVA ha lanzado sobre el Sabadell.
Belarra, lejos de la petición de Sumar de que se paralice esa OPA para evitar que prosiga la concentración bancaria, restó importancia al hecho de que las dos entidades se fusionen o no, porque, «juntos o separados, el BBVA y el Banco Sabadell van a seguir esquilmando a la población española a través de las hipotecas a tipo variable».
«Si queremos realmente que haya justicia social, necesitamos una banca pública en España que introduzca en el sector competencia y que ofrezca a las familias de este país hipotecas a un precio justo y que invierta en economía productiva», contrapuso.
«Insisto: juntos o separados da exactamente igual. Si el Gobierno no interviene, no es valiente e introduce medidas como una banca pública, va a ser imposible que los españoles y las españolas tengan acceso a un servicio bancario suficientemente justo», advirtió.
El mitin propiamente dicho se convirtió en un acto de la precampaña de las elecciones europeas del 9 de junio, en el que Belarra acusó al PP de representar los intereses de los privilegiados y al PSOE de no gobernar defendiendo los intereses que dice defender, como quedaría demostrado en el hecho de que el ministro de Transportes, Óscar Puente, se haya alegrado de que el fondo Blackrock vaya a invertir en España.
Además, alertó de que «estamos en un proceso de restauración del bipartidismo rapidísimo», con el Congreso de los Diputados asistiendo a un constante «y tú más» y un Gobierno «en el que ya sólo manda el Partido Socialista» y «no se hace nada que al Partido Socialista no le guste». «Para esto querían cargarse a Podemos», interpretó.
En cuanto a Palestina, alabó que los universitarios se estén movilizando y hayan conseguido que el Consejo de Rectores rompa simbólicamente relaciones con Israel y lanzó una interpretación acerca de qué grupos constituyen a su juicio el núcleo de las movilizaciones en el mundo contra la invasión de Gaza: que «la gente del sur y la gente racializada saben muy bien que, si se lo han hecho a los palestinos y las palestinas, el día de mañana se lo van a hacer a ellos».
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