MADRID, 04 (SERVIMEDIA)
El número de hogares con temperatura inadecuada creció en España hasta el 17% en 2022, y el retraso en el pago de facturas energéticas mejoró algo hasta el entorno del 9%, lo que se traduce en un aumento de la pobreza energética, pero “a un ritmo menor del esperado”.
Así lo apunta el estudio realizado por la Cátedra de Energía y Pobreza de la Universidad Pontificia Comillas, presentado este lunes, en el que se destaca que en 2022 un total de 4,3 millones de personas no pagaron facturas energéticas en fecha y casi ocho millones no pudieron mantener una temperatura adecuada en sus hogares.
El número de estos hogares creció más moderadamente de lo esperado debido al paquete de medidas de protección social desplegado, destacando el incremento en las cuantías de los bonos sociales eléctrico y térmico, que consiguió reducir la brecha de pobreza energética en los hogares más desfavorecidos.
Pero, incluso con la aprobación de estas medidas, el estudio destaca que los hogares que pagaron un valor desproporcionado por la energía se sitúan en 16,8% del total, a diferencia de los 15,2% del 2021.
El estudio recoge que el valor que más creció de un año a otro fue el de los hogares que no pudieron mantener una temperatura adecuada, con el 17,1% de este año, en comparación con el 14,3% de 2021.
Por último, el informe apunta a que el único valor que mostró una mejora respecto al año pasado fue el de aquellos hogares que tuvieron retrasos en el pago de las facturas, con un 9,2% del total respecto al 9,5% de 2021.
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