MADRID, 10 (EUROPA PRESS) La fuerza de Naciones Unidas en República Democrática del Congo, la MONUSCO, ha asegurado que hará todo lo posible para proteger a los miles de civiles desplazados a la capital de Kivu del Norte, Goma, así como los que se encuentran en la ciudad de Sake, en el territorio de Masisi, escenario en las últimas semanas de un peligroso avance de las milicias del Movimiento 23 de Marzo (M23).
El portavoz de la MONUSCO, el coronel Kedagani Mensah, ha asegurado que ambas poblaciones están protegidas por la operación ‘Springbok’ que la MONUSCO está llevando a cabo con el Ejército congoleño en los territorios de Masisi y Nyiragongo, en el noreste del país.
«Esta operación tiene como objetivo primordial la defensa de ambas ciudades», ha garantizado el portavoz a Radio Okapi sobre esta iniciativa en medio de intensos combates entre las milicias y la fuerza combinada, que están teniendo lugar a solo 30 kilómetros de Goma.
A pesar de la proximidad de los combates, la ciudad ha sido escenario de una visita, este pasado viernes, del ministro de Defensa congoleño y antiguo ‘señor de la guerra’, Jean-Pierre Bemba, para evaluar la situación en persona.
El M23 es un grupo rebelde formado principalmente por tutsis congoleños. Tras un conflicto entre 2012 y 2013, las autoridades y el grupo firmado un acuerdo de paz, si bien la milicia lanzó una nueva ofensiva en octubre de 2022 que ha derivado en una grave crisis diplomática entre RDC y Ruanda, acusada de financiar a estos rebeldes, algo que Kigali ha desmentido categóricamente.
Desde 2022 el conflicto ha obligado a más de un millón de personas a abandonar sus hogares y ha provocado un desastre humanitario en una provincia ya devastada por más de 30 años de enfrentamientos armados, conflictos y desplazamientos masivos.
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