El Ejército paquistaní denuncia «esfuerzos conscientes» para «sembrar discordia» con sus socios, especialmente con Pekín
MADRID, 27 (EUROPA PRESS)
El Gobierno de China ha condenado este miércoles el atentado suicida con coche bomba perpetrado en la víspera en la localidad paquistaní de Dasu, situada en la provincia de Jíber Pajtunjua, en el que murieron cinco de sus ciudadanos, y ha exigido a las autoridades paquistaníes una investigación por el ataque contra vehículos de una presa construida por una empresa china.
«Condenamos enérgicamente este acto terrorista y expresa su más sentido pésame a las víctimas y los familiares de las víctimas. Exigimos que Pakistán investigue a fondo la verdad del incidente lo antes posible, haga todos los esfuerzos posible para encontrar a los atacantes y llevarlos ante la justicia, al tiempo que toma medidas efectivas para proteger la seguridad de los ciudadanos chinos en Pakistán», ha indicado un portavoz del Ministerio de Exteriores chino.
Pekín ha anunciado que está trabajando con Islamabad para «promover plenamente las consecuencias del incidente», mientras que la Embajada china ha recordado a sus ciudadanos en Pakistán que presten «mucha atención a la situación de seguridad local, creen conciencia sobre la prevención, fortalezcan las medidas de seguridad y hagan todos los esfuerzos posibles para prevenir ataques terroristas».
El portavoz ha indicado que el primer ministro paquistaní, Shehbaz Sharif, ha visitado la sede diplomática de China en el país para expresar sus condolencias al Gobierno chino, condenando el ataque y afirmando que «los intentos de los terroristas de destruir la amistad» entre ambos países «nunca tendrá éxito».
«Cualquier intento de socavar la cooperación China-Pakistán nunca tendrá éxito. Nos oponemos a todas las formas de terrorismo y apoyamos firmemente las acciones de Pakistán para combatirlo. Trabajaremos más firmemente con Pakistán para salvaguardar la seguridad del personal, los proyectos y las instituciones chinas en Pakistán», ha concluido el portavoz de la cartera diplomática.
Al menos seis personas, incluidos cinco ciudadanos chinos, murieron cuando varios atacantes empotraron un vehículo cargado de explosivos contra el coche en el que viajaban los cinco ciudadanos chinos y el conductor, de nacionalidad paquistaní.
El Ejército de Pakistán ha denunciado que los «proyectos estratégicos y los lugares estratégicos vitales para el progreso económico de Pakistán y el bienestar de su pueblo están siendo atacados como un esfuerzo consciente para retardar el progreso y sembrar discordia entre Pakistán y sus aliados y socios estratégicos, especialmente China».
«Ciertos elementos extranjeros son cómplices de ayudar e instigar al terrorismo en Pakistán, movidos por sus intereses creados. A pesar de la apariencia de inocencia, estos elementos están siendo continuamente desenmascarados como patrocinadores del terror», reza un comunicado de la oficina de prensa de las Fuerzas Armadas (ISPR).
Además, ha denunciado que «estos atroces actos de violencia contra civiles inocentes, extranjeros y las Fuerzas Armadas no disuadirán la determinación» de «erradicar la amenaza terrorista» del país, a la que «enfrenta» con «absoluta firmeza y plena determinación».
«Con el apoyo inquebrantable de la resiliente nación y de nuestro férreo aliado China, nos aseguraremos de que todos aquellos involucrados en ayudar al terrorismo, directa o indirectamente, rindan cuentas y reciban su merecido. Juntos prevaleceremos sobre la adversidad y el mal», ha concluido.
La localidad de Dasu ha sido objetivo de atentados en el pasado, incluido ataque con bomba ejecutado en 2021 contra un autobús que se saldó con trece muertos, incluidos nueve ciudadanos chinos. Pekín ha invertido miles de millones de euros en proyectos de infraestructura en Pakistán como parte de su iniciativa ‘Franja y Ruta’.
Pakistán ha registrado durante los últimos meses un repunte de los ataques, principalmente por parte de Tehrik-i-Talibán Pakistan (TTP) –conocido como los talibán paquistaníes– y grupos separatistas baluches como el BLA. La inseguridad ha estado centrada en Jíber Pajtunjua y Baluchistán.
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