Tras el último tiroteo activan el dispositivo ‘Límit’ que no estaba en fase de máxima alerta desde 2023
SANT ADRIÀ DEL BESÒS (BARCELONA), 13 (EUROPA PRESS)
Los Mossos d’Esquadra han reforzado los controles policiales en los barrios de la Mina, Besòs y La Pau de Barcelona para detectar armas y drogas en «puntos de interés o puntos negros» de la zona.
Lo hacen a través del dispositivo ‘Límit’, un operativo policial de seguridad ciudadana y de mantenimiento de orden público que existe desde finales de 2021 para abordar los problemas delincuenciales de estos barrios, ha explicado el jefe del Área Básica Policial de Badalona (Barcelona), el intendente Alfons Sarrias.
Este jueves por la noche, Europa Press ha asistido a uno de los patrullajes dinámicos y estáticos de ‘Límit’ en Sant Adrià de Besòs (Barcelona), y ha podido ver cómo los agentes preparaban la zona del control policial.
A raíz del tiroteo del 1 de abril de este año en el barrio de la Mina –en el que una persona resultó herida–, la policía catalana ha reforzado los controles de seguridad y las identificaciones de vehículos y personas.
«El dispositivo ‘Límit’ es de intensidad modulable. Ahora está en fase de máxima alerta por el incidente con arma de fuego registrado en abril. La policía entendemos que son intolerables estos sucesos y que tenemos que poner todos los medios para evitar que conductas con armas de fuego puedan poner en riesgo la vida de otras personas», ha añadido Sarrias.
Estos controles policiales –dinámicos y estáticos– cuentan con agentes de la Brigada Móvil (Brimo); del Área Regional de Recursos Operativos (Arro), y dotaciones de Seguridad Ciudadana, en coordinación con policías locales.
El ‘Límit’, que se mantendrá durante las próximas semanas, permite incrementar el conocimiento policial sobre la zona, ya que se analiza la información recogida a partir de las identificaciones, patrullajes y controles, y se distribuye la fuerza policial y se da respuesta rápida ante posibles incidentes críticos.
TIROTEO 1 DE ABRIL
El incidente más reciente es el del tiroteo del 1 de abril, cuando un joven de 24 años disparó con una pistola e hirió «accidentalmente» a una mujer que se encontraba dentro de un bar de la calle Mart de Sant Adrià del Besòs (Barcelona).
La policía catalana abrió una investigación que culminó con la detención del presunto autor el 10 de abril, y este viernes ha pasado a disposición judicial.
En el mismo dispositivo también se detuvo a otro hombre, no relacionado con el tiroteo, por un requerimiento judicial pendiente, ya que le constaba una condena firme de 13 años de prisión por cuatro homicidios en grado de tentativa y tenencia ilícita de armas.
«Cualquier incidente con arma de fuego preocupa y preocupa mucho, porque no sabemos qué puede haber detrás. También es cierto que la mayor parte de los incidentes que hemos tenido en estos barrios con armas de fuego todos han sido para amenazar a otra familia u organización criminal o para generar alarma social», ha sostenido Sarrias.
FASE DE MÁXIMA ALERTA
El dispositivo no se encontraba en fase de máxima alerta desde el año pasado, cuando también hubo otro incidente con arma de fuego en la que otra persona resultó herida, y los agentes también identificaron y detuvieron al autor.
Concretamente, en el barrio de La Mina, Sarrias ha detallado que durante 2023 la Unidad de Investigación de Badalona (Barcelona) junto con la de Sant Adrià del Besòs hicieron 35 entradas y registros.
PATRULLAJE
Durante el patrullaje llevado a cabo este jueves, los agentes han detenido a varios coches, han comprobado la documentación de sus conductores y, en algún caso, han inspeccionado el vehículo.
«Entre ellos, entre los ciudadanos, se avisan de dónde está la policía haciendo controles y muchas veces se esperan hasta que nos vamos para pasar», ha explicado uno de los agentes de la Arro a Europa Press.
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