MELILLA, 19 (EUROPA PRESS)
La Comunidad Israelita de Melilla ha denunciado este jueves que varios participantes en la concentración pro Palestina celebrada la tarde-noche del miércoles no solo acudieron a protestar a las puertas de la sinagoga principal al grito de «asesinos» sino que también «agredieron verbalmente, con graves insultos, a los judíos de Melilla» y «se nos llegó a aporrear las puertas de nuestros domicilios y acosar a comercios, con las situaciones de pánico que provocan dichas acciones». La entidad que preside Mordejay Guagnich ha pedido que se actúe legalmente contra los autores «porque hechos así no pueden quedar impunes».
A través de un comunicado de prensa, la asociación religiosa ha expresa «su repulsa y condenar de forma enérgica los gravísimos sucesos acaecidos en la tarde-noche de ayer, día 18 de octubre de 2023, contra españoles melillenses, por el simple hecho de ser judíos».
La organización hebrea ha subrayado que la concentración frente a la sinagoga «es un claro y evidente ataque hacia los judíos melillenses en particular y contra Melilla en general».
En su opinión, «entendemos que ese ataque y forma de proceder no puede ser gratuita, esas conductas vienen perfectamente tipificadas en nuestro Código Penal y por lo tanto, no deben quedar impugnes».
La Comunidad Israelita de Melilla ha resaltado que «vivimos en un país libre donde todos los ciudadanos tenemos nuestros derechos, derechos que acaban cuando se quieren hacer valer, vulnerando los de los demás».
En este sentido, ha aseverado que «todos los melillenses tenemos el derecho de llevar a cabo nuestros actos sociales, culturales o religiosos en total libertad, sin que la misma sea coartada».
Asimismo, ha señalado que «la imagen de Melilla también ha sido gravemente dañada y es obligación de todos los melillenses recuperarla y protegerla: no se puede permitir que nuestra imagen y realidad social de convivencia intercultural y ejemplo para el mundo, se fulmine por unos cuantos desalmados».
Desde la entidad que preside Guagnich piden a todos los dirigentes políticos, comunitarios y religiosos y a toda la ciudadanía en general «que demos un paso al frente, para condenar dichos actos y evitar su repetición, para que siga reinando el ambiente la cordura en nuestra ciudad, ejemplo de convivencia y respeto entre las confesiones religiosas y sus respectivas tradiciones».
Tal y como ha recalcado la entidad que dirige Mordejay Guagnich, «a los judíos de Melilla se nos agredió verbalmente, con graves insultos, se nos llegó a aporrear las puertas de nuestros domicilios, acosar a comercios, con las situaciones de pánico que provocan dichas acciones».
Por último, ha destacado que «los judíos melillenses seguiremos acudiendo a la sinagoga –si se nos respeta ese Derecho– a rezarle al Rey del mundo para pedirle que impere la paz en todo la faz de la Tierra».
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