SEVILLA, 24 (EUROPA PRESS)
La Fundación Franz Weber ha pedido al Gobierno central que «se haga cargo, de manera temporal», de las competencias en materia de protección de la infancia y la adolescencia en Andalucía al detectar «un continuado apoyo a actividades violentas que implican estos grupos poblacionales», recalcando que «solo para 2024, la comunidad autónoma andaluza dedicará varios cientos de miles de euros a fomentar la participación de niños en escuelas taurinas».
En esta línea, la entidad ha apuntado en un comunicado que la región andaluza «impulsa subvenciones directas a municipios para eventos de escuelas taurinas». «Estos subsidios acaban financiando becerradas de promoción, donde menores pueden ejecutar de manera directa maltrato sobre bóvidos de corta edad, ante la mirada de sus iguales y familiares, que refuerzan estas conductas con comentarios positivos», ha lamentado.
Desde la Fundación Franz Weber también han afeado que el Ejecutivo andaluz «ignora las advertencias realizadas por FFW en elación a la participación directa e indirectas de menores, habiendo alegado que debería ser prohibida en cumplimiento de las recomendaciones formuladas por el Comité de los Derechos del Niño».
En 2018 y en 2023 este panel de Naciones Unidas encargado de velar por el cumplimiento de la Convención Internacional sobre Derechos del Niño, pidió primero a España y luego de forma general a todos los países firmantes «alejar a las personas menores de edad de la violencia, incluida la ejercida sobre animales». «De este modo Andalucía no solo vulnera estas objeciones internacionales de forma pasiva, también promociona su incumplimiento a través de ayudas públicas y declaraciones de altos cargos», ha abundado la Fundación.
La organización considera que el Gobierno podría poner en marcha la aplicación del artículo 155 de la Constitución para «retirar, al menos temporalmente, la capacidad de Andalucía en políticas de protección de la infancia y la adolescencia, toda vez que su promoción de la tauromaquia busca precisamente introducir a menores en actividades de violencia explícita real».
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