SEVILLA, 6 (EUROPA PRESS)
Hay razones suficientes para pensar que a lo largo de octubre se vislumbrará un gas cotizando por debajo de los 35 euros el megavatio hora, dando como resultado unos precios promedio eléctricos de 90 euros el megavatio hora. Con estas palabras el director general de Tempos Energía, el consultor estratégico Antonio Aceituno ha avanzado que el mercado de gas «se enfrenta a un otoño de precios a la baja», ya que los inventarios de gas actuales se sitúan por encima del 95 por ciento.
Pese a que el pool eléctrico de septiembre ha alcanzado su segundo precio más alto en lo que va de año, tras febrero y superando el nivel psicológico de los 100 euros el megavatio hora y cerrando en 103,34 euros el megavatio hora, Aceituno ha asegurado que, junto a los altos niveles de almacenamiento de gas, habiéndose incrementado con respecto del 78 por ciento al inicio del tercer trimestre, muy por encima del 88 por ciento del pasado año, hace prever que los precios de la electricidad durante octubre, y posiblemente noviembre, no alcancen la barrera de los 100 euros el megavatio hora.
«A ello hemos de añadir que la demanda semanal de gas en Alemania se ha situado un 23 por ciento por debajo de su promedio de 2018 a 2021», ha apuntado Aceituno, quién ha recordado que el consumo durante septiembre en nuestro país se ha situado en una cifra de 612 gigavatios hora al día, lo que ha confirmado una reducción de cerca del 11 por ciento en comparación con los 685 gigavatios hora del mes de julio, inicio del tercer trimestre.
Para su director general, Antonio Aceituno, el mercado del gas está «bien abastecido, los almacenes están llenos y no hay atisbos de un invierno frío», por lo que las perspectivas fundamentales para el gas «son marcadamente bajistas».
De esta forma, desde la consultora energética Tempos Energía, han querido tranquilizar a los consumidores al insistir en que, «pese a la subida de septiembre, las perspectivas del precio del gas para el mes de octubre y, con ello el de la luz, son la baja».
Por otro lado, las previsiones de un clima europeo «muy cálido» para octubre, con temperaturas que alcanzarán los veraniegos 25 grados en algunas partes de Alemania, dibuja un horizonte «con unas despensas generosas y con un invierno que aún no termina de llegar, lo cual va a constituir, una doble palanca de presión para los precios gasísticos».
POSIBLE SUBIDA EN NOVIEMBRE
No obstante, desde la consultora nacional han advertido de que, a partir de noviembre, «cualquier tipo de desencadenante alcista, como el clima frío o la falta de suministros, podría provocar fácilmente una escalada del gas hasta la horquilla de los 80 y 90 euros el megavatio hora», provocando cotizaciones del pool que giren en torno a los 150 y 160 euros el megavatio hora, previa activación de la excepción ibérica.
Además, el director de Tempos Energía ha recordado, como otro factor clave en el escenario gasístico, que «la empresa Chevron cerró recientemente el acuerdo con casi 500 trabajadores de sus dos instalaciones, poniendo fin a la disputa que amenazaba con interrumpir hasta el seis por ciento del suministro mundial de gas natural licuado».
Sin embargo, el experto ha matizado que «el intenso programa de mantenimiento a finales de verano en los yacimientos de gas noruegos mantiene a los mercados nerviosos, haciendo posible un gas cotizando por encima de los 40 euros el megavatio hora, debido en gran medida a las continuas indisponibilidades».
«Esto se ha evidenciado en que, en cuanto a su capacidad, el principal socio de Europa por tubo, Noruega, va actualmente a una velocidad de crucero del 78 por ciento», ha advertido.
«Aún así, la actual capacidad no disponible de 127 metros cúbicos al día al día debería reducirse a cinco millones el 16 de octubre, por lo que, en caso de cumplirse, el regreso de la capacidad total a mediados de octubre va a agregar presión a los precios, coincidiendo con un momento en el que el almacenamiento se encontrará en máximos históricos», ha explicado.
En esta línea, «el único riesgo al alza parece ser la posible competencia con Asia por el gas natural licuado», en un contexto en el que las importaciones asiáticas alcanzaron la semana pasada su nivel más alto desde mediados de marzo y se espera que las importaciones mensuales sean las terceras más altas de este año. «Sin embargo, por suerte para Europa, este hecho se produce cuando los inventarios del Viejo Continente están rozando el 100 por 100 de su capacidad», ha comentado Aceituno.
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