Defiende que incluya mecanismos de garantías de cumplimiento del modelo de la economía social
BARCELONA, 2 (EUROPA PRESS)
El pleno del Parlament ha aprobado este jueves una moción de ERC que insta al Govern a tramitar la Ley de Economía Social y Solidaria para su aprobación durante 2022, algo que ha contado con el apoyo de todos los grupos parlamentarios excepto Vox y PP, que han votado en contra, y Cs, que se ha abstenido.
La moción defiende que la ley incluya mecanismos de control y garantías de cumplimiento del modelo de la economía social y solidaria, y apuesta por promover la vivienda cooperativa en cesión de uso en la Ley de Vivienda y facilitar mecanismos del Institut Català de Finances (ICF) para permitir la financiación de este modelo.
También defiende prever la planificación y el calendario de la futura ley del Tercer Sector y la modificación de la de Cooperativas y de la de Empresas de Inserción, e impulsar un Pacto Catalán por una Economía de la Vida en coordinación con la Associació Economia Social Catalunya (Aescat), aspectos que han prosperado con los mismos votos.
En el marco de las competencias de la Generalitat, plantea impulsar las modificaciones legislativas en materia de contratación y de compra pública para potenciar la colaboración público-comunitaria, así como crear un marco en el que en las licitaciones se compita no sólo en el precio, sino también para mejorar el impacto social y ambiental, algo que han rechazado Vox, Cs y PP y ante lo que la CUP se ha abstenido.
DEBATE EN EL PLENO
La republicana Alba Camps ha destacado la importancia de transformar la economía y de hacerlo poniendo «la vida en el centro» y los derechos por encima del capital, y ha abogado por fomentar la intercooperación y la convicción de que genera un mejor impacto colaborar que competir.
Jordi Munell (Junts) ha destacado la «larga tradición» de Catalunya de la solidaridad en torno a las actividades económicas, y ha defendido promover redes y priorizar la orientación hacia el interés general y el bien común.
Desde la CUP, Eulàlia Reguant ha avisado de que se requieren medidas para exigir una fuerte implicación de la economía social y solidaria en un nuevo modelo económico que tenga como pilar un sistema público que garantice los cuidados y una manufactura de impacto social y ambiental positivo.
El socialista Jordi Riba ha puesto en valor la aportación de la economía social y solidaria «no sólo a nivel económico, sino también por los valores y principios que aporta a la economía y a la sociedad», como la equidad, la sostenibilidad y el compromiso con el entorno, ha citado.
Sergio Macián (Vox) ha expresado su apoyo a la economía social y solidaria pero no a contraponerla al modelo tradicional y hacerlo criticando el capitalismo, la economía de mercado y el libre comercio, y ha dicho que la propuesta de ERC «parece una moción de factura ‘cupera».
Desde los comuns, Joan Carles Gallego ha pedido potenciar y promocionar el modelo de economía social y solidaria, desde cooperativas pero también desde entidades sin ánimo de lucro y desde «estructuras participativas en la producción o el consumo que hagan que la ciudadanía tome protagonismo en las decisiones relativas al bienestar social en general».
El diputado de Cs Joan García ha recordado a ERC que forma parte del Govern y se ha preguntado los motivos por los que directamente no impulsa esta ley: «A veces son mecanismos para retrasar aquello que muchos de nosotros pensamos que está pendiente».
Y Alejandro Fernández (PP) cree que algunos quieren privar al resto de algo de lo que ellos disfrutan, y ha puesto como ejemplo las botas de montaña caras que cree que lucen diputados de la CUP y que pueden comprar con una sonrisa a un conservador con el que discrepan políticamente: «Aquí está la magia del libre comercio».
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