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La Xunta acusa al BNG de «mentir» sobre la futura ley del ciclo del agua y difunde una carta a la alcaldesa de Tomiño

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Infraestruturas asegura que no se crea ninguna tasa, pero asumirá el canon de saneamiento si gestiona los colectores

SANTIAGO DE COMPOSTELA, 20 (EUROPA PRESS)

La Consellería de Infraestruturas ha salido al paso de las críticas del BNG al anteproyecto de ley del ciclo del agua que prepara la Xunta y acusa a la formación nacionalista de «mentir», al tiempo que ha esgrimido una carta enviada a la alcaldesa de Tomiño, Sandra González, en 2020.

Así, la Xunta dice en su comunicado que el BNG gobierna en alguno de los municipios gallegos «con más beneficiarios por el apoyo que presta Aguas de Galicia» a los ayuntamientos en el ejercicio de sus competencias de saneamiento, abastecimiento y depuración.

Asimismo, defiende que el objetivo de la ley que prepara es «ordenar, reforzar y extender» esa ayuda a todos los ayuntamientos que lo solicitan, «sin crear nuevos impuestos». El BNG advirtió, por su parte, que el texto (que todavía no entró en la Cámara y que estuvo a exposición pública hasta el 15 de septiembre) «triplica» los impuestos y además obliga a los ayuntamientos a sumarse a la organización de la Xunta si quieren recibir inversiones a cambio.

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Uno de los ayuntamientos que «más se ha beneficiado» de este apoyo de la Xunta, señala, es el de Tomiño «cuya alcaldesa se manifestó hoy en contra del modelo de ayuda impulsado por la Administración autonómica», motivo por el que «lamenta su incoherencia».

Así, y esgrimiendo una carta de respuesta a la alcaldesa de Tomiño del año 2020, apunta que este municipio «rechaza asumir la gestión de la depuradora municipal y acepta que sea Augas de Galicia la que se encargue de su funcionamiento desde hace años, proporcionándole un ingente apoyo económico y técnico a este municipio».

Así, se dirige a Sandra González para indicarle que «si no está de acuerdo con el modelo que le proporciona la Xunta a su municipio, puede asumir de forma inmediata la gestión de la depuradora municipal, haciéndose cargo de los costes y de la responsabilidad de su mantenimiento».

MODELO «VIABLE»

El departamento que dirige Ethel Vázquez señala que el anteproyecto de ley de gestión del ciclo integral del agua pretende «ordenar y reforzar el apoyo» que la Xunta presta a los ayuntamientos. Dice que, por un lado, se establece un «modelo viable» para que se pueda extender la colaboración a todos los ayuntamientos que voluntariamente lo soliciten» y, por otro, se habilita un canal para que ese apoyo se pueda ampliar a la gestión de nuevas instalaciones, como colectores.

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«El fin último es mejorar los servicios que se prestan a los ciudadanos y la calidad de las aguas de Galicia sin subir tasas ni crear otras nuevas, limitándose a reordenar las que ya existen», ha remarcado.

La Xunta recauda el llamado coeficiente de vertido que, con la nueva ley, pasará a llamarse canon de gestión de depuradoras para «adecuarse más a su funcionalidad». En los ayuntamientos en los que la Xunta no gestiona la depuradora, los costes son recaudados por el ayuntamiento y así continuará con la nueva ley.

La Xunta será la que pase a cobrar por los servicios de saneamiento en aquellos municipios en los que empiece a gestionar los colectores, sustituyendo la tasa que antes recaudaba el municipio.

«El anteproyecto de ley no lleva aparejada la creación de nuevas tasas. La ordenación de los sistemas gestionados por Augas de Galicia permitirá aplicar economías de escala y la implementación de medidas de eficiencia hará posible ahorrar costes, lo que redundará en una disminución de los gastos asociados a la prestación de los servicios», apunta la Xunta.

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Así las cosas, el Gobierno emplaza al BNG a «abandonar las falsedades y las declaraciones irresponsables sobre la gestión del agua, así como a asumir de forma efectiva un compromiso real con los objetivos sociales y ambientales de mejora de la calidad de las aguas». El próximo viernes están convocadas las distintas partes afectadas para volver a abordar esta cuestión.


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