MADRID, 4 (EUROPA PRESS)
El Gobierno de Turquía ha criticado la «irresponsable decisión» de Estados Unidos sobre la acogida de afganos que pudieran estar en peligro de represalias de los talibán tras la retirada de las tropas internacionales y ha destacado que el territorio turco no puede convertirse nuevamente en un país de paso en una «crisis de refugiados».
El Ministerio de Exteriores turco ha resaltado que, en el marco de estos programas para dar refugio a estas personas, «Turquía ha sido sugerido como posible punto de presentación de solicitudes», antes de agregar que «esto causará una gran crisis de refugiados en la región y aumentará la miseria de los afganos en las rutas migratorias».
«En lugar de buscar una solución entre los países de la región, buscarla en Turquía sin nuestro consentimiento es inaceptable», ha dicho en un comunicado publicado en su página web, en el que ha recordado que el país «acoge el mayor número de refugiados durante los últimos siete años».
«Turquía no tiene la capacidad de soportar otra crisis de refugiados por otro país. No aceptamos la irresponsable decisión de Estados Unidos, adoptada sin consultas. Estados Unidos podría transportar directamente a estas personas en avión», ha argüido.
En este sentido, ha hecho hincapié en que «Turquía no asumirá las responsabilidades internacionales de otros países ni tolerará bajo ninguna circunstancia un abuso de sus leyes por parte de otros países para sus propósitos». «Turquía no puede soportar la carga de las crisis de refugiados causadas por las decisiones de otros países», ha remachado.
El Gobierno de Estados Unidos anunció el lunes un nuevo programa para acoger a «miles» de refugiados afganos que no cualificaban para un visado especial por parte del país norteamericano, en el marco de sus esfuerzos para «dar la oportunidad de un estatus de refugiado a ciertos afganos, incluidos los que han trabajado con Estados Unidos».
El anuncio llegó después de que el presidente estadounidense, Joe Biden, anunciara el viernes la llegada al país del primer grupo de 200 colaboradores afganos de las fuerzas norteamericanas, que han recibido un visado especial de protección para escapar de posibles represalias.
Los avances de los talibán, que se han hecho con zonas fronterizas con Pakistán, Tayikistán e Irán, han provocado el temor de que puedan aprovechar esta posición de fuerza en el proceso de paz, lanzado a raíz del acuerdo de paz firmado en febrero de 2020 entre los insurgentes y Estados Unidos.
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