MADRID, 22 (EUROPA PRESS)
El Gobierno de China ha confirmado este lunes el secuestro de cinco de sus ciudadanos en un ataque contra una mina en el este de República Democrática del Congo (RDC) y ha pedido a las empresas y los ciudadanos del gigante asiático que aumenten las precauciones tras los últimos raptos en este país y en Nigeria, donde fueron raptados otros tres chinos.
El portavoz del Ministerio de Exteriores chino, Zhao Lijian, ha resaltado que el último ataque en la provincia congoleña de Kivu Sur se saldó con un policía muerto y cinco ciudadanos chinos secuestrados, antes de destacar que otros ocho ciudadanos fueron trasladados a lugar seguro.
«El Ministerio de Exteriores chino ha dado instrucciones a la Embajada en RDC para que active su mecanismo de respuesta de emergencia tras tener noticia del incidente y ha contactado con los departamentos locales para llevar a cabo esfuerzos de rescate que garanticen la seguridad de los rehenes», ha añadido.
Asimismo, ha resaltado que otros tres ciudadanos chinos que trabajaban para una empresa del gigante asiático en el estado nigeriano de Nigeria (centro) fueron secuestrados el viernes por personas no identificadas, antes de apuntar a un aumento de este tipo de incidentes en lo que va de año.
Por ello, Zhao ha hecho hincapié en la necesidad de que empresas y ciudadanos tengan en cuenta el aumento del riesgo en estos países y ha subrayado que las autoridades han solicitado que se refuercen las precauciones y los preparativos para la respuesta de emergencia, según ha informado el diario chino ‘Global Times’.
Las palabras de Zhao han llegado dos días después de que Christophe Bonanée, presidente de la sociedad civil del territorio congoleño de Mujera, resaltara que ocho ciudadanos chinos habían sido trasladados a paradero desconocido por los atacantes, cuya identidad se desconoce.
El administrador del territorio de Fizi, Kawaya Aimé, confirmó el suceso y agregó en declaraciones al portal congoleño de noticias Actualité que dos militares figuran también entre los secuestrados. «No podemos cerrar los ojos ante este asunto. Estamos en plena investigación para ver cómo liberar a los rehenes y detener a los responsables», ha afirmó.
Según Actualité, el suceso tuvo lugar en medio de las tensiones entre la población local y la Cooperativa Minera para el Desarrollo Integral (COMIDI), que opera en sociedad con Bayond Mining, por el impacto de sus actividades en la zona y la ausencia de compensaciones.
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