El conseller de Hacienda y Modelo Económico, Vicent Soler, ha subrayado que «la desviación del déficit de la Comunitat Valenciana es consecuencia directa del injusto sistema de financiación, que nos otorga menos ingresos».
Por ello, ha advertido de que «cumplir el déficit sería a costa de maltratar a los valencianos ya que supondría gastar todavía menos que la media de las autonomías y no estamos dispuestos a hacerlo».
Vicent Soler ha realizado estas declaraciones tras conocer las previsiones del informe de cumplimiento de los objetivos de estabilidad presupuestaria de 2018 elaborado por la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (Airef).
Según ha señalado Soler, la conclusión de la Airef, que considera «improbable» que la Comunitat Valenciana cumpla este año el objetivo de déficit fijado en el 0,4% del PIB valenciano, es «obvia», dado «el nivel de recursos con los que cuenta la Comunitat Valencianda derivado del sistema de financiación».
Por ello, ha pedido a la Autoridad Fiscal que se pregunte «por qué será» que la Comunitat Valenciana se va a desviar del límite del déficit, al tiempo que ha defendido que «un análisis completo no debería ignorar las causas de fondo para evitar conclusiones incompletas».
«Está archidemostrado por todos los expertos, tanto del ministerio como de las diferentes autonomías, que la Comunitat Valenciana es la peor financiada de España. Si a eso unimos que los mismos expertos han acreditado que gastamos por debajo de la media, es de cajón pensar que la Comunitat Valenciana se desvía del objetivo de déficit por un problema de ingresos y no de gastos», ha recalcado el conseller.
«A pesar de ello, gracias a una gestión responsable y eficiente, el déficit se ha reducido de forma extraordinaria, pero aún con esa reducción es muy complicado cerrar este ejercicio en el 0,4% de déficit, teniendo en cuenta el nivel de los ingresos», ha lamentado Vicent Soler.
De 2.564 de déficit a 796 millones En concreto, el déficit de la Generalitat ha pasado de 2.564 millones (-2,54% del PIB valenciano) al cierre de 2015, al llegar el actual Ejecutivo, a 1.571 millones (-1,50%) al término de 2016 y a 796 millones (-0,73%) en 2017, reducción que evidencia «la buena gestión llevada a cabo por el actual Consell».
El titular de Hacienda ha apuntado que el informe de la Airef no hace referencia a la insuficiencia de ingresos que sufre la Comunitat Valenciana, cuando se trata de un factor que es determinante para el cumplimiento de los objetivos de déficit.
Gasto por habitante por debajo de la media El gasto global por habitante en la Comunitat Valenciana se sitúa 8,7 puntos por debajo de la media de las comunidades autónomas, ya que mientras el gasto anual por cada valenciano fue de 3.130 euros en 2016, la media de las autonomías se situó en 3.429 euros, según los cálculos elaborados por el IVIE a partir de las cifras oficiales hechas públicas por la IGAE y el Ministerio de Hacienda.
«Cada valenciano cuenta con 299 euros menos de los que disponen de media los ciudadanos de otras autonomías, cifra que multiplicada por los cinco millones de valencianos supone un brecha en el gasto de 1.495 millones», ha señalado Soler.
Primero, las personas «Si la Comunitat Valenciana cumpliera con el déficit el crecimiento del gasto sería de los más bajos de España, lo que tendría como consecuencia el que se incrementara la brecha con respecto a los ciudadanos de otros territorios y generando con ello una situación de desigualdad de los valencianos», ha explicado el conseller.
«Desde el Consell tenemos claro que nuestra prioridad son las personas, especialmente asegurar su acceso a unos servicios públicos con una calidad homologable a la de los del resto del país, y por ello no estamos dispuestos a cumplir ningún objetivo a costa de maltratar a los valencianos», ha asegurado Soler.
El conseller de Hacienda ha argumentado que «hay que observar el nivel de ingresos per cápita de cada comunidad autónoma para hacer un análisis con mayor profundidad, porque de otro modo se aplica el mismo rasero a situaciones que son muy diferentes.
«En el caso valenciano tenemos que prestar los mismos servicios que otros pero no tenemos los mismos recursos, por lo que un análisis que excluya esta cuestión resulta sesgado. El problema de fondo es que el actual sistema de financiación no nos coloca a todos en la misma situación de partida», ha afirmado Soler.
«Las Torres de Benidorm incrementarán el déficit» El titular de Hacienda también ha lamentado el hecho de que el informe de la Airef «muestra de forma palpable cómo la nefasta herencia y pufos del pasado constituyen una mochila de piedra en la espalda de los valencianos», toda vez que el documento refleja incertidumbres en el gasto como el coste total asociado a la demolición de las Torres de Benidorm, una decisión que tomó el anterior Consell en contra de informes técnicos y que finalmente han tumbado los tribunales.
En la Cuenta General de 2017 ya hubo que provisionar este coste, con alrededor de 72 millones, si bien las últimas estimaciones técnicas elevan el gasto a unos 100 millones.
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