El 75% de los municipios no llegan al objetivo del 50% marcado por la UE
BARCELONA, 31 (EUROPA PRESS)
El Àrea Metropolitana de Barcelona (AMB) ha explicado que la metrópolis ha alcanzado un porcentaje de recogida selectiva de residuos del 38,4% en 2020, 0,6 puntos porcentuales más que el año anterior, ha explicado en un comunicado.
Los resultados de recogida selectiva de residuos en la área metropolitana durante el 2020 han continuado la tendencia al crecimiento que mostraron en 2019, después de que en 2018 se superara un estancamiento de casi una década alrededor del 35%.
Paralelamente, en 2020 la generación de residuos también ha disminuido, pasando de los 475 kilos de residuos por habitante en 2019 a los 455 kilos en 2020, en gran parte, como consecuencia de la pandemia.
Ha sido especialmente importante la disminución de la fracción de resto, que ha pasado de los 298 kilos por habitante por año en 2019 a los 281 en 2020.
En un año marcado por el contexto de la pandemia de la Covid-19, la excepcionalidad de la situación puede haber introducido distorsiones en la evolución natural de los índices, aunque a pesar de todo las tendencias ya observadas el 2019 se han mantenido y, en general, todos los indicadores han mejorado respeto hace un año.
INSUFICIENTE
Sin embargo, a pesar de la mejora generalizada el 75% de los municipios metropolitanos todavía no ha conseguido llegar al objetivo marcado por la Unión Europea (UE) para el 2020: un nivel del 50% de reciclaje.
De cara a los próximos años, la UE ha establecido nuevos objetivos: llegar al 55% de recogida selectiva en 2025, al 60% en 2030 y al 65% en 2035.
«A pesar de encontrarnos en un contexto atípico, marcado por una pandemia que ha provocado un cambio de hábitos, seguimos viendo como el modelo que impulsamos desde el AMB, basado en una individualización más grande de la recogida, está dando resultados», ha dicho el vicepresidente de Ecología del AMB y concejal de Emergencia Climática y Transición Ecológica del Ayuntamiento de Barcelona, Eloi Badia.
Asimismo, ha añadido que el ritmo de mejora todavía es demasiado lento y habrá que trabajar para que más municipios hagan el gran salto adelante en la recogida: «Ya hemos llegado al primero de los plazos marcados por la UE, el 2020, sin haber logrado el objetivo, y la única manera de llegar será con la individualización de la recogida», ha dicho.
La experiencia metropolitana es que los municipios que han optado por sistemas de recogida individualizada, tanto domiciliaria –Torrelles, Tiana y el barrio de Sarrià, en Barcelona– como comercial –Castelldefels y Sant Just Desvern– experimentan incrementos sustanciales de los niveles de recogida.
INCREMENTO DE COSTES
El AMB calcula que si los municipios no despliegan sistemas de recogida selectiva más eficientes, el coste del tratamiento podría llegar a aumentar en 20 millones de euros desde ahora hasta el 2025, debido sobre todo al incremento del canon de disposición final de los residuos en depósito controlado o incineración.
Económicamente las diferencias entre municipios en cuanto a la recogida selectiva son muy importantes: El índice de reciclaje modula el importe que los habitantes de cada municipio pagan en concepto de tasa metropolitana de tratamiento y disposición de residuos ylos municipios que mejor reciclan pueden pagar hasta 3 veces menos que los que separan peor.
Actualmente esta tasa oscila entre los 20 y los 56 euros por hogar y año, unas cifras que van en función de la generación de residuos y el índice de reciclaje.
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