SEGOVIA, 26 (EUROPA PRESS)
La Diputación de Segovia ha puesto en marcha la Estrategia de Innovación en materia de Servicios Sociales para los años 2021-2025, un documento que toma como base la atención centrada en la persona, la afectividad consciente y la mejora continua del sistema.
Este documento surge de la evaluación de la Estrategia 2020 y se divide en tres vectores que son los apoyos y cuidados de larga duración, la mejora continua del Sistema de Gestión de Calidad y la creación del Centro de Investigación e Innovación Social (CIIS), los cuales se concretan en diez líneas de actuación «concretas y tangibles», según ha subrayado el presidente de la Diputación, Miguel Ángel de Vicente.
El objetivo, según ha señalado de Vicente, «es que las personas se mantengan en su entorno, manteniendo sus arraigos en el sitio que han elegido para desarrollar su vida, su modo de vivir en su comunidad».
Por ello, la institución provincial ha puesto en marcha una serie de recursos como el servicio de comida a domicilio, la teleasistencia o el servicio de ayuda a domicilio. Paralelamente se ha iniciado un trabajo coordinado con los ayuntamientos para facilitar la autonomía personal.
Por otro lado, en el vector que desarrolla los apoyos y cuidados de larga duración se han planteado planes personalizados, con el objetivo de ofrecer una «visión de conjunto en la que están involucrados distintos grupos de profesionales» ha añadido De Vicente.
Además, el presidente de la institución ha matizado que «una persona pasa por diferentes momentos y la Diputación busca que «no pierda lo más importante, su seña de identidad y su capacidad de vivir como quiera vivir», tratando de evitar la soledad no deseada «mediante actuaciones comunitarias».
Por ello, entra en juego la figura de las comunidades que cuidad, una iniciativa para involucrar a los vecinos de los pueblos con el objetivo de convertirlos «en radares que permitan detectar problemas con personas vulnerables y paliar la soledad no deseada».
AFECTIVIDAD Y CIIS
Del mismo modo, se busca que cuando una persona pase a vivir en un centro residencial, se mantenga su vida «en base a sus gustos e intereses». Aquí es donde entra en juego el concepto de la afectividad consciente, para que, según ha señalado De Vicente, «las personas se sientan seguras desde el afecto, proporcionando un acompañamiento en su vida».
Además, con la mejora continua del Sistema de Gestión de Calidad se pretende que los profesionales trabajen según lo planificado y a través de una herramienta de calidad que siga creciendo, tomando como base la atención centrada en la persona.
Pro último, en lo que respecta a tercer vector, se busca materializar en un centro de referencia estudios sociales para generar conocimientos para todos los profesionales.
Por ello se plantea la creación del Centro de Investigación e Innovación Social «para que revierta en una mejor atención a las personas más vulnerables», ha finalizado De Vicente.
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