El proyecto Fémina, en el que participa el Gobierno regional junto a otros socios europeos, ha resultado ganador de la tercera convocatoria Interreg Europe 2017
La vicepresidenta regional y consejera de Universidades e Investigación, Medio Ambiente y Política Social, Eva Díaz Tezanos, y el consejero de Economía, Hacienda y Empleo, Juan José Sota, han presentado hoy el proyecto Fémina, con el que el Gobierno de Cantabria, en colaboración con otros socios europeos, ha resultado ganador de la tercera convocatoria Interreg Europe 2017, y por el que la Comunidad Autónoma recibirá 225.000 euros para diseñar políticas que favorezcan la participación de la mujer en empresas de alta tecnología.
Tal y como ha explicado Díaz Tezanos, la partida que le corresponde a Cantabria (225.000 euros de los 1.551.328 euros con los que cuenta el proyecto) de destinará a la Dirección General de Igualdad y Mujer y a SODERCAN para que durante los próximos cuatro años se pueda comprobar cómo los instrumentos políticos pueden corregir el desequilibrio de género en pequeñas y medianas empresas de alto componente tecnológico.
«Existen muchas y muy complejas causas para este desequilibrio de género, incluyendo muchas veces prejuicios en el mercado laboral y también en el entorno sociocultural», ha señalado la vicepresidenta.
Asimismo, ha destacado la importancia de este proyecto para el Gobierno de Cantabria porque «nos permitirá trabajar y compartir ideas, experiencias y buenas prácticas para ir eliminando la brecha de género, tanto en las carreras como en las profesiones relacionadas con la tecnología».
También ha lamentado las cifras del último informe de la OCDE sobre el «Panorama de la Educación en 2017», que pone de manifiesto que la presencia de las mujeres en carreras relacionadas con la educación (79%) y la salud y el bienestar social (72%) es desproporcionada, mientras que sólo el 12% de las mujeres estudiantes, optan por carreras tecnológicas.
Por ello, ha abogado por «intentar poner todos los medios a nuestro alcance para intentar evitar esta brecha tan importante». En este sentido, ha avanzado que el Gobierno regional y la Universidad de Cantabria están trabajando en la elaboración de un estudio sobre cómo reducir la brecha de estudiantes en las carreras relacionadas con las ciencias, las tecnologías, las ingenierías y las matemáticas.
Además de Cantabria, en el proyecto participan como socios la agencia italiana de innovación ‘Arrezo Innovazieone’, la Cámara de Comercio de Arezzo (Toscana, Italia), el Centro Europeo de la Mujer y la Tecnología (Noruega), la Agencia de Desarrollo Regional de Bucarest (Rumanía), la Región de Dalarna (Suecia) y la Región de Grecia Central. Todos ellos especificarán las mejoras concretas que desean realizar en el desarrollo de nuevos proyectos, cambios en la gestión y en el foco estratégico, relacionado todo ello con el aumento de la competitividad de las pymes de alto componente tecnológico.
Fase de aprendizaje y de implementación
El proyecto Fémina contará con una primera fase de aprendizaje y una segunda de implementación, y se creará un grupo integrado por actores clave en la temática de empleo femenino e igualdad de género, como son personas relacionadas con la innovación, representantes del mundo empresarial y expertos en género.
En concreto, serán representantes de las direcciones generales de Igualdad y Mujer, Universidades e Investigación, y Economía y Asuntos Europeos; la Universidad de Cantabria (UC), la Cámara de Comercio de Cantabria; la CEOE, la Asociación de Mujeres Empresarias, además expertos y expertas en género de la UC.
Todos ellos, ha precisado Díaz Tezanos, se encargarán de analizar las razones regionales para la existencia de la brecha de género en el sector de alto componente tecnológico, abordando causas específicas como las barreras al emprendimiento femenino, las de acceso al empleo y al progreso en la carrera profesional en pymes con alto contenido tecnológico y la falta de atención a la dimensión de género en el ámbito de la innovación.
Se trata, ha dicho la vicepresidenta, de intercambiar ideas y experiencias a nivel interregional para definir cómo las políticas regionales pueden apoyar medidas para abordar las barreras existentes en la actualidad, tales como actividades de comunicación y concienciación entre las pymes y la comunidad de investigación e innovación, y la sociedad civil; el apoyo a mujeres interesadas en sectores de alto contenido tecnológico, en materia de formación, asistencia continúa, infraestructuras y recursos, y abordar las dificultades para acceder a la financiación y a los riesgos de inversión para potenciales emprendedoras.
En cuanto a la primera fase del proyecto, que tendrá una duración de tres años, se llevarán a cabo seminarios con expertos organizados por la entidad líder; talleres plenarios y grupales mediante el uso de técnicas participativas; prácticas entre los socios participantes, y tutorías, para que los socios reciban durante todo el proyecto el apoyo y la asistencia técnica necesaria para el desarrollo de la metodología planteada.
Díaz Tezanos ha destacado la participación conjunta que llevarán a cabo la Dirección General de Igualad y Mujer y SODERCAN para detectar barreras en el acceso de mujeres a pequeñas y medianas empresas de base tecnológica de sectores como la digitalización, las tecnologías de la información y de la comunicación, medioambientales o nuevos sectores creativos y de manufacturas avanzadas. Para ello, se organizarán talleres con otras regiones y se expondrán políticas de éxito como buenas prácticas que hayan abordado el problema.
Además, organizarán en el mes 21 una reunión trasnacional en Cantabria con la presencia de todos los socios del proyecto Fémina, así como posibles actores relevantes. La vicepresidenta ha explicado que se desarrollarán talleres de trabajo para llevar a cabo intercambio de ideas en la futura elaboración de un Plan de Acción Interregional «para tratar de solucionar las barreras de género existentes».
La primera fase del proyecto se completará con un taller sobre transferencia de políticas de género que aborden el problema objeto del proyecto.
En cuanto a la segunda fase, la de implementación, de un año de duración, cada región deberá movilizar a los actores relevantes para desarrollar el plan común para todo el partenariado, estableciéndose reuniones regionales de monitorización del desarrollo del Plan de Acción.
El proyecto concluirá con un evento final en el que se expondrán los resultados obtenidos, así como «posibles desviaciones, problemas encontrados y acciones futuras concretas».
«Mayores recursos económicos»
Por su parte, el consejero de Economía, Hacienda y Empleo, Juan José Sota, ha destacado el esfuerzo del Gobierno de Cantabria para poner en marcha este proyecto que, según sus palabras, «se trata del primer proyecto presentado por la Oficina de Proyectos Europeos y servirá para tener mayores recursos económicos de los previstos en los presupuestos regionales».
Para Sota, este proyecto demuestra la capacidad de trabajo intenso que tiene la Comunidad Autónoma para captar fondos europeos y que la ha llevado a tener más presencia que nunca en las convocatorias europeas.
En la tercera convocatoria de Interreg Europe 2017, se presentaron 234 solicitudes de toda la UE y han participado 1710 instituciones. En total se han aprobado 54 proyectos, de los cuales 14 han sido seleccionados, y entre ellos se encuentra el Proyecto Fémina.
El consejero, ha puesto de manifiesto que «el Gobierno de Cantabria está trabajando intensamente en la captación de fondos europeos y que nunca nuestra región había tenido tanta presencia en convocatorias europeas».
También ha puesto en valor la finalidad del proyecto Fémina para desarrollar estrategias para impulsar la mayor presencia de las mujeres en las empresas de alta tecnología.
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